La oferta turística y patrimonial de Llerena se ha visto incrementada este mes de agosto de 2017 con la puesta en valor de los grabados de la Casa Maestral así como con la ampliación del contenido del Museo Histórico Ciudad de Llerena donde se ha abierto una sala que recrea la Plaza Mayor y su evolución a través del tiempo.

Se ofrece una visita complementaria entre la Casa Maestral y el Museo con el Tribunal de la Inquisición como nexo de unión. En la Casa Maestral se conserva un grafiti que un preso realizó en el muro de las cárceles secretas del Santo Oficio y está localizado en las oficinas de rehabilitación de la vivienda. Su acceso al mismo es complicado y para facilitar su divulgación así como su apreciación pública se ha realizado una réplica a escala real del mismo. Obra llevada a cabo por el alfarero Florentino Martín y por el restaurador Carlos Navas con la misma técnica que el original: con punzón. Esta reproducción se ha instalado en la planta baja en una zona de fácil visibilidad para el visitante.

El valor de este grafiti es innegable para el conocimiento de nuestra historia. Es el único documento que del Tribunal de la Inquisición de Llerena se conserva en nuestra ciudad. Lo realizó un preso en el muro de las cárceles secretas del Santo Oficio, allá por los años cuarenta del siglo XVI. La Inquisición tenía entonces su sede en lo que se conoce como Casas Maestrales. En un patio con dos corredores se instalaron 23 celdas, de 2x2 metros cada una, en las plantas alta y baja del mismo. El grafiti conservado es de 1,85 metros de largo por 1,40 de alto. Este grafiti es el testimonio vital que nos deja el preso antes de ser ajusticiado. La obra no tiene texto. Su autor no podía manifestar expresamente con palabras un mensaje que hubiera supuesto una prueba más, en manos de los inquisidores, para su condena. El grabado narra la conquista de México y cómo los españoles implantaron un nuevo orden social y moral, con la evangelización de los nativos y la proscripción de sus rituales sagrados y costumbres salvajes. El documento sigue una estructura en 4 tiras de secuencias, compuesta de viñetas abiertas, colocadas unas sobre otras, cuya lectura se realiza de abajo arriba y de derecha a izquierda. El mensaje heterodoxo de este judío condenado por la Inquisición de Llerena dice claramente que la evangelización llevada a cabo allí durante las guerras de la conquista a los indios no se les tratara como infieles sino como si fueran herejes o apóstatas, tal y como actuaba la Santa Inquisición y no como lo debería hacer la iglesia evangelizadora. No se les atraía principalmente enseñándoles la doctrina católica de palabra y con buenos ejemplos, sino que se reprimían sus religiones, ritos y creencias.

Ya en el Museo Histórico Ciudad de Llerena se han habilitado dos salas más. En una de ellas, en la planta baja, se muestran los trabajos que el artista local Davisín ha realizado, en la técnica actual, sobre los grabados de la casa maestral; se expone también la fotografía sobre la que se ha realizado la réplica de dicho grafiti.

Por otro lado, la nueva sala de la planta alta acoge una evolución histórica de la Plaza Mayor de Llerena, situándose en ella desde el año 1.786. El espacio arquitectónico y urbanístico de nuestra Plaza Mayor ha sido trasladado al Museo con tres soportes diferentes: imágenes, audivisuales y dioramas. Se ha elegido la antigua Sala de Audiencias del Palacio Episcopal como espacio propicio para esta exposición.

La sala se divide en dos espacios por su mitad, con la colocacin de un panel central. En el primer espacio el visitante se encontrará dentro de la Plaza Mayor. En el suelo de la sala hay un punto de visión donde situarse y contemplar los cuatro costados de la Plaza, según el plano que se rescató del Archivo Histórico Nacional, cada uno de ellos colocado en una pared diferente.  En cada pared figuran cada uno de los alzados del plano, con un tamaño de 1’20 m de alto por el ancho que proporcionalmente le corresponde a cada lado de la Plaza: el Portal del Pan, el Portal de la fruta con el ayuntamiento, el lado de la Imprenta con la iglesia incluida y finalmente el lado del Poniente. En el segundo espacio, en que queda dividida la antigua Sala de Audiencias del Palacio Episcopal, hay varias reproducciones de planos, el diorama que representa un Auto de fe en la Plaza Mayor, así como un televisor donde se proyectaré el documental sobre la Plaza Mayor, de Producciones Morrimer.

Las reproducciones de planos son las referidas a los trabajos de D. José Joaquín de Hermosilla y Sandoval para la Iglesia Mayor y también la propuesta de Juan de Villanueva para la reforma de la torre, que no se llegó a realizar. Son dos de los más grandes arquitectos de la Ilustración española.

También figuraran a cada lado del televisor dos planos de la Plaza Mayor, uno de ellos anterior a la reforma de la misma de finales del XVIII y otro con la reforma proyectada y que es la seña de identidad de la Llerena de las Luces. Tenemos así la visión de la Plaza del siglo XVI en un plano al lado del televisor y en el otro lado la Plaza del siglo XVIII.

En otro estremo de la sala se ha colocado el diorama con el Auto de fe en la plaza, obra de Vicente Juliá. Con esta recreación de nuestra Plaza Mayor quedan unidas en cuanto a temática, las actuaciones ahora inauguradas y es que el Tribunal de la Santa Inquisición de Llerena celebraba sus Autos de Fe en la Plaza de España.

En el acto de inauguración de estas novedades, que se celebró mediante un recorrido primero en la Casa Maestral y después en el Museo, participaron Valentín Cortés, Alcalde de Llerena, el historiador Manuel Toro, el archivero municipal, Francis Mateos y los autores de la réplica del grafiti Florentino Martín y Carlos Navas. Valentín Cortés destacó la puesta en valor de las potencialidades de Llerena en este caso, a través de la iniciativa privada y particular; de ahí su agradecimiento “a ellos al igual que a otros muchos que, a través de sus iniciativas, se ha potenciado el conocimiento de nuestra historia y nosotros lo que hemos tratado es de recogerlas y cuando ha sido posible, encaminarlas”. Lo ahora inaugurado ha sido posible gracias al trabajo e implicación de personas como Manuel Toro, Francis Mateos, Ángel Hernández y la Asociación Cultural Morrimer así como los autores de la réplica Florentino Martín y Carlos Navas.

Por último, Valentín Cortés puso en valor las restauraciones de edificios públicos llevadas a cabo durante los últimos 18 años y recordó que a día de hoy no hay nada de patrimonio municipal por restaurar salvo lo que está en proceso. En ese sentido, también avanzó que, en lo que es el patrimonio eclesiástico que hay en la localidad, además de la limpieza de las bóvedas de la Iglesia de Santiago, posiblemente también se llevará a cabo la limpieza de la piedra interior y “es probable que también pueda haber ahí pinturas murales”.